El río Duero, con sus hermosas laderas bordeadas de viñedos en terrazas, es un paisaje tan bello que forma parte del Patrimonio Mundial de la Unesco. Nada más apropiado, pues, que haya sido elegida Capital Europea del Vino 2023.
Aunque no es exactamente una ciudad, la región ganó el concurso que celebra anualmente la Red Europea de Ciudades del Vino (Recevin), entidad que promueve el turismo y difunde las regiones productoras de Europa, compitiendo con otras dos candidatas portuguesas: Algarve y Vale do Lima.
El Duero (Douro en portugués)
La región del Douro, en el norte del país, sucede a Aranda del Duero, en la región productora de Ribera del Duero, en el centro-norte de España — curiosamente, un valle del mismo río, ya que “Duero” es el nombre español del Douro. La ciudad española fue elegida en 2020, pero su “mandato” se prorrogó debido a la pandemia del covid-19.
Responsable de la candidatura del Duero, el Consejo Intermunicipal del Duero (CIM Duero) quiere consolidar la región no sólo como destino vitivinícola, sino como una región que, gracias a sus paisajes, que pueden contemplarse desde un río navegable, se abre al mundo.
“El Duero, que ya es patrimonio de la humanidad, se convertirá así en una referencia europea en vino, viñedos, cultura y celebración de la naturaleza”, destacó el alcalde de Concelho de Peso da Régua y portavoz de la candidatura, José Manuel Gonçalves.
La Capital Europea del Vino es un concurso anual promovido por Recevin desde 2012 e integra a las asociaciones nacionales del vino de 11 países miembros — Alemania, Austria, Bulgaria, Eslovenia, España, Francia, Grecia, Hungría, Italia, Portugal y Serbia —, que se turnan año tras año -en 2023 le toca a Portugal.